Crónicas de Lasallistas en Casa |Francisco Alonso |Licenciatura en Fisioterapia

25 DE JUNIO DE 2020
“CRÓNICAS DE LASALLISTAS EN CASA” ES UN ESPACIO EN EL QUE NUESTRA COMUNIDAD ESTUDIANTIL NOS COMPARTE SUS EXPERIENCIAS Y REFLEXIONES EN TORNO A LA SITUACIÓN QUE ENFRENTAMOS ANTE LA PANDEMIA POR COVID 19.
HOY LES COMPARTIMOS EL ESCRITO DE UNO DE NUESTROS ESTUDIANTES DE LA LICENCIATURA EN FISIOTERAPIA, FRANCISCO ALONSO.

 

Entre pantallas y ventanas.

Hace noventa y cuatro días, la institución instauró el programa de educación a distancia. Ochenta y siete van desde que la sede donde realizaba mis prácticas profesionales nos liberó, la última vez que salí de fiesta fue el catorce de marzo de este año, pensando que solo sería un mes sin ver a mis compañeros y amigos, ingenuo, pensé que sería algo pasajero y que volvería a la “normalidad” antes de mayo. Ahora ya no sé qué es lo normal, llevamos casi cien días distanciados, vivimos la Semana Santa, día de las madres, cumpleaños y las graduaciones de nuestros compañeros; todo desde la distancia y a través de una pantalla.

Pantalla que hemos adoptado en casa como ventana, aquella que nos muestra el mundo sin salir de casa, que nos acerca con los que más queremos, que ayudó como salón de clases durante todo este tiempo, y también como la aliada que nos aleja del mundo, mundo que está pasando una de sus peores crisis tanto social, económica y moral.

Han sucedido cosas como el supuesto fallecimiento de un líder mundial, hasta la muerte de una persona en Estados Unidos que desencadenó un conflicto a gran escala.

El mundo se cae a pedazos, nada nuevo, toda la vida hemos sido testigos de noticias que presagian el fin. Aun así, hoy es diferente, tenemos el peso del fin del mundo en los hombros ¿por qué? Por algo muy simple, antes esas noticias tan graves se convertían en un tópico de conversación o en tema de clase, antes vivíamos tanto y tan rápido que no teníamos tiempo de asimilar la información, hoy tenemos el tiempo de sobra para reflexionar y pensar sobre todo lo que sucede día a día.

Por esto, nuestra pequeña pantalla nos es fundamental ahora, porque así como podemos tener la cuenta regresiva, también podemos ver a nuestro entrenador favorito y seguir su rutina de ejercicios; aprender una nueva receta sin temer quemar la cocina de por medio, leer sobre la vida de un pintor, ver las aventuras de un joven ninja, vivir en la piel de un brujo en un mundo medieval, incluso podemos ser parte del fin del mundo si así lo queremos y distraernos un poco de nuestro propio apocalíptico presente, que parece hasta distópico.

El entretenimiento será nuestra herramienta más fuerte en estos futuros días de vacaciones y confinamiento, nuestra pequeña pantalla será nuestra espada y la familia nuestro escudo contra los días que vienen. A la distancia podremos estar unidos; platicando por teléfono con nuestro mejor amigo, o comiendo en compañía de nuestros padres, haciendo ejercicio con compañeros del gimnasio, o simplemente mandando mensajes a las personas que queremos para preguntar cómo están, todo es válido, no necesitamos salir por un café para ponernos al día, porque hoy estamos a un clic de distancia, hoy permaneceremos unidos a la distancia, entre ventanas y pantallas. Indivisa Manent.