06 DE AGOSTO DE 2020
“CRÓNICAS DE LASALLISTAS EN CASA” ES UN ESPACIO EN EL QUE NUESTRA COMUNIDAD ESTUDIANTIL NOS COMPARTE SUS EXPERIENCIAS Y REFLEXIONES EN TORNO A LA SITUACIÓN QUE ENFRENTAMOS ANTE LA PANDEMIA POR COVID 19.
HOY LES COMPARTIMOS EL ESCRITO DE JAQUELINE SILVIA DE LA LICENCIATURA EN ARQUITECTURA.
Aún recuerdo cuando el último día de clases le dije a mis compañeros que los vería el próximo lunes, ese mismo día confirmaron el primer caso de Covid-19 en Oaxaca y fue ahí cuando todo comenzó a cambiar; todas las escuelas suspendieron clases y todos estábamos preocupados por lo que iba a pasar.
En la escuela al principio hubo muchos problemas, ya que, algunos compañeros no podían entrar a su correo institucional porque casi no lo usábamos para tareas, tardaron una semana más o menos en hacer que todos tuvieran su correo para recibir información de las clases, comenzamos a tener clases en la plataforma de zoom, teams, pero no era igual, en nuestro caso que es la carrera de arquitectura, fue muy difícil llevar a cabo un proyecto que teníamos de un centro comercial, ya que si nos quedaban dudas teníamos que mandar correos para explicar que no habíamos entendido.
Muchas personas entraron en pánico y comenzaron las compras en los supermercados dejando vacíos los estantes de pastas, frijoles, arroz, huevo, etc. Todas las personas temían que ya no hubiera producción de alimentos, al igual que el recorte de personal en muchos trabajos; las personas no tenían como percibir ingresos, no podían salir a trabajar porque existía el riesgo de contagiarse, a mis padres no les pagaban igual por lo que pagar la colegiatura nos preocupó mucho ya que somos dos alumnas que estudiamos en la Universidad.
Como fue pasando el tiempo, nos fuimos acostumbrando a tener las clases y recibir tarea por correo, mi mamá continuó trabajando, pero los casos de contagiados en el estado seguían aumentando cada vez más y muchas veces personas que conocíamos fallecían por el virus. En el mes de Mayo, mi hermana y mi abuelita se contagiaron de COVID-19 por lo que se tuvieron que aislar en diferentes partes de mi casa, debíamos tener mucho aseo y cuidado para que nadie más de la familia se contagiara; mi hermana estuvo dos semanas sin salir de mi cuarto, ella ahí recibía sus clases y hacía las tareas, muchas veces la enfermedad no la dejaba hacer bien sus cosas, a mí me tocó dormir en la sala todo ese tiempo y era muy incómodo porque tenía clases a las 7 am y ahí mismo las tomaba pero no podía hacer ruido ya que mi abuelita dormía en la parte de abajo y los dolores de cabeza no la dejaban dormir. Esas dos semanas fueron muy largas y difíciles para mí ya que no estábamos acostumbrados y no teníamos la información suficiente para tratar ese virus.
Afortunadamente mi abuelita y mi hermana lograron curarse sin contagiar a nadie más de la familia, pero quedaron secuelas.
Terminamos el semestre, mejor de lo que yo hubiera esperado, este semestre que inicia será más fácil poder conectarnos para recibir clases y enviar tareas, pero espero que pronto nuestro estado llegue a semáforo verde ya que arquitectura es una carrera en la que se necesita tener clases presenciales y pienso que todos queremos regresar a nuestra normalidad, aunque el uso de cubre bocas sea obligatorio y aunque muchas cosas tengan que cambiar, espero que pronto sea así y que todos estemos bien.