Día Internacional de la Lucha contra los Trastornos de la Conducta Alimentaria

“Obsesión por un cuerpo perfecto. Palabras que traducen el sentir de muchas personas que enfrentan esta lucha a diario"

Sebastián Juárez

Mónica Hernández

Edel Jiménez

 

Los trastornos de conducta alimentaria se definen como alteraciones conductuales en la ingesta de alimentos que inician por múltiples causas, algunas de las más comunes son: malos hábitos alimenticios en la familia, el medio ambiente, la educación, los anuncios publicitarios y los estereotipos explícitos, así como la presión de los compañeros por poseer un “Cuerpo perfecto” viéndose reflejados en actitudes que se presentan en el acto de comer, siendo característicos por su manera polarizada: “comer en exceso o privarse del alimento” bajo la idea de insatisfacción corporal, evitando el aumento de peso o la disminución del mismo. 

Este tipo de trastornos se dividen en anorexia nerviosa, bulimia nerviosa y el trastorno de conducta alimentaria no especificado. 

La anorexia nerviosa o comúnmente conocida solo por anorexia es característica en las personas que restringen demasiado la cantidad de ingesta de comida y en consecuencia, presentan un peso corporal anormalmente bajo, temor intenso a aumentar de peso y percepción distorsionada del cuerpo.

La bulimia nerviosa o bulimia es visible en personas que consumen grandes cantidades de alimentos (denominados atracones), para después vomitar lo consumido, en consecuencia tienden a usar laxantes de manera inapropiada, suplementos para bajar de peso, diuréticos o enemas después del atracón con la finalidad de deshacerse de las calorías y evitar aumentar de peso. 

Por lo general, estos trastornos aparecen durante la adolescencia, generando un impacto significativo en el bienestar personal, como posibles cambios en el estado de ánimo, irritabilidad, agresividad, hostilidad, distorsión en la autopercepción, miedo a subir de peso, etc. A nivel físico se encuentran con debilidad óseo muscular, pérdida de aceites en la piel, caries y encías débiles, vaciamiento gástrico e intestinal enlentecido e inclusive  la muerte por desnutrición o suicidio  

 

¿Qué se puede hacer para combatir un trastorno de conducta alimentaria? 

Los trastornos alimentarios se tratan mejor cuando son manejados por un equipo interdisciplinario, que a menudo incluye un médico, un nutriólogo y un psicólogo.

El tratamiento incluye asesoramiento nutricional, atención médica y psicoterapia (individual, grupal y familiar).  

En el ámbito nutricional, la educación alimentaria juega un papel fundamental para conllevar este proceso, el profesional de nutrición tiene la capacidad de proporcionar al paciente y a su familia las herramientas necesarias de manera específica para cada caso.

Dichas acciones se determinan bajo la meta de corregir los estados de desnutrición que ponen en riesgo la vida del paciente, y con el objetivo de recuperar el estado de salud mejorando totalmente su relación con la comida. 

Este proceso no es fácil pero tampoco imposible, de la mano de un grupo de profesionales y con el apoyo familiar se puede recuperar o en su caso salvar la vida de quien padece alguno de estos trastornos de conducta alimentaria. 

En el marco del día internacional de luchas contra los trastornos de conducta alimentaria invitamos a formar parte de la solución ayudando a quienes viven estas batallas. 

 

 

Referencias  

  1. Chinchilla Moreno, A. (2003). Trastornos de la conducta alimentaria. TE: trabajadores de la enseñanza. 
  2. Méndez J.P.,Vásquez Velásquez V., y García E. (2008) Los trastornos de conducta alimentaria. Boletín Médico Hospital Infantil de México. http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-11462008000600014 
  3. Vargas Baldares. M.J. (2013) Trastornos de conducta alimentaria. Revista Médica de Costa Rica y Latinoamérica LXX (607) 475 – 482. https://www.medigraphic.com/pdfs/revmedcoscen/rmc-2013/rmc133q.pdf